Explorar nuevos mercados puede ser una buena solución para hacer frente a la crisis. En los dos primeros meses de 2012, las ventas de las empresas españolas hacia el exterior se han incrementado un 4,4% en comparación con el mismo periodo el año pasado, según la Secretaría de Estado de Comercio Exterior. Las pymes vuelven a ser las que más apuestan por traspasar las fronteras.
No obstante, si tienes un negocio y quieres lanzar tus productos a otros lugares, es preciso que valores una serie de aspectos antes de arriesgarte. A continuación, siguiendo al portal ‘muypymes.com’, os ofrecemos los siete pasos a tener en cuenta antes de internacionalizar tu empresa:
– A dónde quieres expandirte. Para elegir el destino donde desembarcarán tus productos, antes que nada debes tener en cuenta la viabilidad de la operación, los medios con los que cuentas y prever las inversiones que serán necesarias.
– Analiza el área de negocio. Aunque ese mercado esté en auge, lo mismo tu producto no interesa o no tiene cabida en ese lugar pues la competencia es bastante alta. Como orientación, los productos más exportados desde España pertenecen al sector agroalimentario, mecánico, idustrial y mobiliario, según un informe del Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX)
– ¿Necesidad de socios? La internacionalización no es igual en todos los países. En algunos no podrás introducirte en su mercado si no cuentas con la ayuda de un socio local. Ten en cuenta las posibles barreras de entrada así como otras condiciones para desembarcar allí.
– Presentación digital. No contar con una carta de presentación digital puede cerrarte alguna que otra puerta. Cualquier cliente, socio o proveedor quiere saber quién eres y la forma más rápida de comprobarlo es entrando en tu página web corporativa. Es importante por tanto tenerla actualizada.
– Actividad en las redes sociales. Unido al paso anterior, también es considerable que dispongas de cuentas corporativas en redes sociales, sobre todo en las relacionadas con el mundo empresarial. Además allí podrás estar en contacto con otras empresas y hacer networking.
– Dotación tecnológica importante. Los trámites que conlleva internacionalizar tus productos (pedidos, entregas, contabilidad en múltiples divisas…) pueden acabar siendo un problema si no cuentas con un buen soporte tecnológico.
– Busca otras empresas en situación similar. Si necesitas reducir gastos y riesgos, lo mejor es cooperar con otra empresa que tenga experiencia en proyectos como el que quieres llevar a cabo o simplemente esté en la misma situación que tú.
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