Según un informe elaborado por la Asociación de Grandes Empresas de Trabajo Temporal (AGETT), de los 55.600 parados que cambiaron de localidad de residencia en 2008, 38.800 consiguieron empleo un año después de la migración. Por otro lado, el 20,1% siguió sin enconatrar empleo y el 10,1% pasó a la inactividad.
En 2008 más de 593.000 personas se cambiaron de ciudad, lo que representa un descenso del 22,6% respecto a 2007. De esa cifra, el 11% eran desempleados, frente a un 52% de personas que sí tenían trabajo. Un 15,4% eran estudiantes y un 12,8%, personas que se ocupan de las tareas del hogar.
El estudio señala que la zona con mayor saldo migratorio positivo es la zona Este de la Península (Cataluña, C.Valenciana y Baleares) con 64.500 migrantes, seguida por Madrid con 44.200 personas.
En términos de franja de edad, los migrantes con mayor tasa de paro son los jóvenes de entre 16 y 19 años y los mayores de 40 años (con una tasa de desempleo del 25,8% para los de edades entre 40 y 49 años, y del 20,3%
para los mayores de 50).
Igualmente, los jóvenes son los que tienen una tasa de migración más elevada. Las personas con una siendo el tramo de edad comprendida entre los 20 y 29 años migran con más facilidad, situándose en un 3,22%, más del doble de la tasa general): Los jóvenes de entre 16 y 19 años son los segundos en cambiar de residencia con más ferecuencia, con un 2,37%.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) realizaeste estudio cada año, a través de la Encuesta de Población Activa (EPA)y la Encuesta de Migraciones (EM).
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